Uno de los emblemas rosarinos es el Parque Independencia, situado en el centro, en un predio que abarca más de un kilómetro cuadrado y en el que está emplazado El Rosedal, que consta de distintas especies de rosas, esculturas y la fuente de cerámica más grande del mundo, que fue donada en 1936 por la comunidad española; y el Jardín Francés, con diversos arreglos florales y una gran fuente de mármol.

También están emplazados en este predio, el Hipódromo; el Museo de la Ciudad, abierto en 1902; el Estadio Municipal Jorge Newbery; el Museo Municipal de Bellas Artes Juan B. Castagnino y el Jardín de los Niños, con su máquina de volar, otra para trepar y una tercera para hacer ruido, más la montaña mágica o encantada. El Club Gimnasia y Esgrima de Rosario, el Club Atlético Newell's Old Boys y el Club Atlético Provincia, también tienen cabida en el Parque Independencia.

Situado en la intersección de las calles Sarmiento y Santa Fe está ubicado el tradicional bar El Cairo, inaugurado en 1943 y frecuentado por intelectuales y artistas, entre ellos el inolvidable Negro Fontanarrosa, afamado humorista y escritor. Infinitas charlas, anécdotas y debates de café, quedaron plasmadas en el libro de su autoría "La Mesa de los Galanes".

La peatonal Córdoba es recorrida a diario por turistas y lugareños que visitan sus negocios, restós, galerías, shoppings y librerías. Al final de la peatonal se ubica la Estación Fluvial colmada de embarcaciones listas para navegar, que brinda un seguro y eficiente servicio de traslados e información sobre itinerarios y destinos para el turista que desee conocer las islas Banquito San Andrés, Casablanca, Puerto Pirata e isla Verde.

Estas vastas costas de arena del otro lado del río, que cuentan con paradores, servicios de restaurante, bar, sombrillas y reposeras, son ideales para pasar el día a pleno sol y playa, disfrutando de una vista paradisíaca o practicando deportes acuáticos, como navegación a vela, remo, windsurf, esquí acuático, canotaje, pesca deportiva, y también para nadar, ya que sus aguas son incontaminadas.

El balneario municipal La Florida, ubicado sobre la ribera norte, ofrece todos los servicios y es la principal zona de veraneo ya que cuenta con playa, canchas de fútbol y de voley, servicio de limpieza, seguridad privada, bar y estacionamiento.
El Balneario Rambla Catalunya, también en la zona norte de la ciudad, cuenta con 600 metros de doradas arenas y paradores con servicios de bar, restaurante, seguridad, duchas y estacionamiento.

En la zona norte de la costa sobresale la silueta de una faraónica obra arquitectónica, el Puente Rosario-Victoria, también conocido como Puente del Mercosur, por servir de vínculo para el corredor bioceánico, que atraviesa el ancho cauce del río Paraná, a lo largo de 60 kilómetros, hasta la ciudad entrerriana de Victoria.

Rosario tiene una movida nocturna impactante: boliches, bailantas, teatros, cines, tanguerías, restaurantes y bares. Sobre el ingreso sur de la ciudad, en la intersección de Boulevard Oroño con la Avenida de Circunvalación, emerge el fastuoso Complejo City Center, una obra arquitectónica que conjuga un hotel cinco estrellas, un centro de convenciones para dos mil personas y un casino.

El casino cuenta con tres niveles y aloja unas 2.000 máquinas tragamonedas de avanzada tecnología, ruletas electrónicas, 80 mesas de juego -entre Ruleta, Black Jack y Punto y Banca- , Salón de Poker, área VIP, Bingo, variedad de restaurantes y confiterías donde se presentan shows y una playa de estacionamiento con capacidad para más de 2.000 vehículos.

En cuanto a hospedajes, Rosario cuenta con hoteles de diversas estrellas, cabañas, departamentos en alquiler y campings por doquier. La gastronomía abarca todas las gamas de la cocina nacional e internacional, destacándose los platos de río con pesca del día y parrilladas.

Situada al sur de la provincia de Santa Fe y a 320 km al norte de la ciudad de Buenos Aires, Rosario es un símbolo patrio en sí misma: allí, el 27 de febrero de 1812, Manuel Belgrano, hizo flamear en la Batería Libertad la bandera argentina por primera vez.

Para que nadie olvide ese gesto patriótico, en el Parque Nacional a la Bandera, justo en el sitio donde estaba la batería y ocupando una superficie de 10.000 metros cuadrados, se alza el imponente Monumento a la Bandera, inaugurado el 20 de junio de 1957.

Construido en mármol travertino, comprende la Torre Central, rodeada de esculturas; el Propíleo, altar donde se rinde homenaje a los muertos por la patria; el Patio Cívico, que une ambos cuerpos arquitectónicos; y la Galería de Honor de las Banderas de América. En sus recintos suelen brindarse conciertos, conferencias y muestras de arte.