San Juan es sinónimo de naturaleza y turismo aventura
30/07En medio de un entorno desértico, este territorio está recorrido por ríos cordilleranos que han sido encauzados por diques, canales y acueductos que han posibilitado el desarrollo de la producción vitivinícola.
La provincia de San Juan ofrece en un marco natural de incontrastable belleza, la posibilidad de internarse en sus paisajes lunares y ejercer la contemplación de un cielo diáfano e inmenso, todo apto para el turismo aventura o el novedoso turismo astronómico, además de la gran oferta de sus famosos viñedos.
En medio de un entorno desértico, este territorio ubicado a más de 1.100 kilómetros de la ciudad de Buenos Aires está recorrido por ríos cordilleranos que han sido encauzados por diques, canales y acueductos que han posibilitado el desarrollo de la producción vitivinícola.
Uno de los puntos culminantes, apto para el turismo aventura y deportes no convencionales, es el circuito que sube a más de 4000 metros sobre el nivel del mar para admirar Los Penitentes sanjuaninos, una formación de hielo que surgen por la acción del sol y del viento sobre grandes acumulaciones de nieve en terrenos de gran aridez.
Para los amantes del windsurf, el dique Cuesta del Viento es considerado uno de los mejores lugares del mundo para la práctica de este deporte por sus condiciones geográficas y climáticas.
Otra opción interesante que ofrece la provincia es el turismo rural, y en particular la realización de cabalgatas por la cordillera de Los Andes.
Una las auténticas joyas naturales sanjuaninas está constituída por el Parque Provincial Ischigualasco -conocido también como Valle de la Luna-, uno de los yacimientos paleontológicos más importantes del mundo declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.
Junto al Parque Nacional Talampaya, en la vecina provincia de La Rioja, pertenecen a una misma cuenca de 5000 metros cuadrados y han sido incluidos en esa privilegiada lista internacional en el año 2000.
El Parque Provincial Ischigualasco ocupa una extensión de 25 kilómetros de largo por 10 kilómetros de ancho en los que se pueden observar restos de vertebrados que habitaron en el lugar hace 180 millones de años.
Además, es posible tener la magnifica experiencia de reconocer pisadas de saurios, improntas de helechos y troncos de araucarias petrificados.
Para quienes quieren desfrutar de la contemplación de uno de los cielos más límpidos del mundo, el Parque Nacional El Leoncito es el lugar ideal por su ubicación y por la infraestructura montada para tal fin.
Se encuentra ubicado sobre los faldeos occidentales de las Sierras del Tontal de la precordillera andina, en el departamento de Calingasta, a 30 kilómetros de la ciudad de Barreal.
Con una superficie de 80.706 hectáreas, la unidad conserva una muestra representativa de los biomas Monte de Sierras y Bolsones, Puna y Alto Andino, que incluyen yacimientos arqueológicos de gran valor y sitios de relevancia históricos.
Además, garantiza la diafamidad y transparencia atmosférica necesarias para realizar observaciones astronómicas.
En tal sentido, destacan los dos observatorios ubicados en el área que garantizan una atracción única para este tipo de establecimientos y que pueden ser visitados por los aficionados a esta disciplina.
Por su parte, la capital provincial es una opción por demás apetecible caracterizada por su limpieza, la generosidad de su gente, y las modernas edificaciones producto de la reconstrucción que se llevo a cabo tras el terremoto sufrido el 15 de enero de 1944 que destruyó el 80% de la ciudad.
En la actualidad, sus calles y plazas arboladas se encuentran rodeadas de cerros, valles y quebradas que hacen un espectáculo único para una ciudad que se recrea a si misma.
La corta distancia de tantos atractivos naturales hacen de la ciudad de San Juan el lugar ideal para pernoctar con el objetivo de practicar durante el día una serie de deportes extremos, turismo de aventura y eventos especiales.
Entre los sitios para recorrer es ineludible dirigirse a la casa que perteneció al ex presidente Domingo Faustino Sarmiento, o visitar los museos que se ubican en sus calles y avenidas.
Entre ellos, el Museo de Ciencia Naturales, que contiene una invaluable colección de restos fósiles del Período Triásico encontrados en Ischigualasto; el Museo de Bellas Artes y Museo Histórico Provincial, con colecciones de pinturas, esculturas, grabados y dibujos de artistas nacionales; y el Museo Antigua Bodega, que exhibe máquinas, toneles y prensas utilizados en el siglo pasado para la fabricación del vino, entre otros.
A sólo 16 kilómetros de la ciudad, está la champañera Cavas de Zonda, construida en 1928 por inmigrantes yugoslavos -existen sólo tres de su tipo en el mundo- con gigantescos túneles en siete niveles, en uno de los cuales se encuentra la champañera.
Finalmente, las suaves y tranquilas noches sanjuaninas invitan a recorrer los bares y restaurantes de la ciudad para elegir alguno y disfrutar de la elaborada gastronomía local, siempre acompañada de algunos de los mas exquisitos vinos que produce la provincia.